El arquero de El Talar relató su
experiencia con los Murcielagos, cuales son las diferencias en el juego, y
además contó detalles del campeonato del mundo del 2015.
Germán Muleck es arquero de Futsal,
actualmente juega en El Talar, y también es arquero de la Selección Argentina
de Fútbol para ciegos, Los Murciélagos. Anteriormente a formar parte de la
selección, Germán jugaba fútbol sala, pero el cambio que genera jugar con los
Murcielagos es demasiado complejo, por eso contó sus sensaciones: “Mi
adaptación me costó, fueron dos años en donde tuve que cambiar muchas reglas a
comparación de las que había donde jugaba. En el futsal adaptado saber hablar
es fundamental y lo tenemos que hacer muy bien, porque además de atajar soy
como un técnico dentro de la cancha. Hay que estar atento a atajar, pero además
a guiar. Utilizamos códigos y palabras claves para cada movimiento nuestro y
del rival”.
Además, recordó cómo fue su llegada a
la selección: “Cuando el técnico me llamo en la semana y me dijo que quería que
siga entrenando sentí un orgullo enorme. Apenas llegas, el grupo te hace sentir
parte muy rápidamente y eso es muy lindo. Encima, entrar al Cenard y ver que
tenes todos los elementos para entrenar, es un gran orgullo. Sentir que vas a representar al país es una
sensación hermosa”.
Muleck tuvo la suerte de ser parte
del equipo campeón del mundo en Corea Del Sur en 2015, y no pudo ocultar su
felicidad al recordarlo: “Ser campeón del mundo es algo hermoso. Ese partido lo
íbamos perdiendo 0-1, lo empatamos rápido y faltando 6 segundos le dimos vuelta
el partido a Inglaterra. Fue una alegría enorme, además por cómo se dio el
partido, también cuando llegamos al país y la gente nos reconoció el logro, fue
algo mágico”.
Asimismo, el guardameta está más que
conforme con la elección que hizo al elegir ser parte de los Murcielagos:
“Estoy orgulloso de la decisión que tomé porque es un orgullo estar en la
selección y compartir equipo con ese grupo de jugadores que en realidad, somos
una familia. Mi prioridad siempre es la selección, por suerte, El Talar me da
la posibilidad de entrenar con normalidad y además me da libertad con los
viajes, eso es algo muy positivo que admiro del club del cual soy parte hoy en día”.
Por último, el arquero de la
selección manifestó su gran amor por el Futsal: “El futsal en mi vida es todo,
me levanto y me acuesto pensando en ello. Estoy siempre entrenando, por la
tarde lo hago con el fútbol para ciegos y a la noche lo hago con El Talar hasta
las 11 de la noche. Además, por la mañana soy profesor de educación física, y
también soy entrenador de arqueros de los chicos más jóvenes del Talar. Gracias
a este deporte conocí otras culturas, me dio títulos, medallas, resumidamente
el futsal es mi vida”.
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